miércoles, 29 de mayo de 2019

CRÓNICA DEL ROGAINE PARTACUA. 25 de mayo 2019

Rogaine: carrera de orientación a pie cuyo objetivo es conseguir el mayor número de puntos mediante el paso por balizas marcadas en un mapa, cada una de las cuales tiene un valor preestablecido. Se corre en equipos que pueden ir de 2 a 5 componentes y con un límite de tiempo variable según la prueba pero que suele ser de varias horas hasta un día entero. El orden de paso por las balizas es libre, por lo que la estrategia para decidir a cuáles ir y por qué ruta es fundamental.
De nuevo gracias a la organización de Peña Guara y la Federación de Orientación (FEDO) pudimos vivir otro gran día de orientación, en esta ocasión en el maravilloso entorno de la sierra de La PartacuaY allí estábamos, como no podía ser de otra manera, los Sin Rumbo Raid, formando esta vez pareja Noé y yo. Elegimos la modalidad de 6 horas, aunque también existía la opción de 2 y 4 horas. 
 La primera alegría nos la llevamos al recoger la bolsa del corredor ya que entre los obsequios se incluían una longaniza y un chorizo, ¡gracias, organizadores!. Y no sólo eso; también un tarjetón de propaganda del ansiado Campeonato de España de Raids, que en septiembre se celebrará en tierras del Sobrarbe, dando continuidad a la experiencia del año pasado.
Ya en la salida vemos que hay un gran número de participantes, de todas las edades y sexos, lo cual siempre anima y da ambiente a la prueba. Pero también nos percatamos de un detalle... Noé es casi el único corredor que no lleva calcetines largos, y más de uno sonríe maliciosamente al ver sus impolutas espinillas, pensando en esos tramos entre zarzas que siempre suelen aderezar estas carreras.
Nos dan el mapa y 15 minutos para establecer una estrategia antes de la salida. Aunque intentamos ser rigurosos y establecer una ruta lógica, ambos sabemos que a la media hora de carrera habremos aplicado el "a tomar pol culo" y el plan inicial se habrá hecho añicos, así que tampoco nos estresamos mucho antes de la cuenta atrás.


Salimos hacia el oeste, marcando una serie de balizas por monte bajo y bosque de robles y pinos, muy embarrados tras las últimas lluvias.  Poco a poco vamos ganando altura y dejando la vegetación para salir al prado alpino, ya en el entorno del ibón de Piedrafita, uno de los puntos neurálgicos de la carrera. Aunque aguantó sin llover, el día no era precisamente caluroso y en esa zona el viento nos recordó lo bien que venía la doble camiseta que llevábamos.  Esta parte de la carrera nos gustó especialmente, ya que casi todas las balizas se enlazaban yendo campo a través,  lo cual hacía la navegación muy entretenida. 








Tras el avituallamiento del ibón de Tramacastilla, repleto de agua como pocas veces lo he visto, empezamos el descenso por la pista que conduce al pueblo. Llavamos casi 5 horas de rogaine y ya hay que empezar a controlar el tiempo. Tras marcar unas cuantas balizas técnicas, en barrancos y cotas laterales a la pista, llegamos al premio final; el hayedo de Betato. Este bosque, bonito en cualquier momento del año, esta ahora en mayo exhuberante con sus brotes y hojas nuevas, agua por cada barranquera y esa tonalidad ocre del suelo. Sabiendo que la meta estaba ya cerca, aprovechamos para disfrutar estas últimas balizas, las más fotogénicas probablemente del recorrido. 


Y tras 5 hs y 45 minutos, 30 kms de recorrido y 1210 metros de desnivel positivo... llegamos a la meta del Piedrafita Mountain Lodge para disfrutar del ambiente y felicitar, una vez más, a Jorge García y la gente de Peña Guara, a los voluntarios y a la FEDO por la excelente organización.
¡Y una cosa más!: tal y como se advertía en las bases, en esta carrera no se usaron vasos de plástico.  De hecho cada corredor debía llevar su propio recipiente para avituallarse. Menos residuo, menos contaminación... ¡a ver si cunde el ejemplo!.


NOTA: Casi todas las fotos están extraídas de la web oficial del Rogaine (https://www.rogainepartacua.com/). Gracias a los voluntarios que las hicieron y a los participantes que salen en ellas. 

martes, 28 de mayo de 2019

Sendas de Valdeatalaya. Villamayor de Gállego (por Jacobo)

A pesar del penoso viento que nos asola estos días, decidimos (Juaneras y yo) salir con la Bici y conocer una ruta que ya he visto varias veces reseñada ultimamente.
Saliendo desde el Azud y por el siempre lioso y monótono camino a Villamayor, se cruza el pueblo y se accede al  Val de Atalaya. Se trata de una serie de bucles con subidas cómodas y bajadas con algo mas de jugo.
Sendas ciclables en su mayor parte en este tiempo seco (con barro será otra cosilla). Sin ser unos grandes bajadores, apenas nos desmontamos en media docena de pasos, bien por prudencia o bien por falta de técnica,  pero ninguno se veia dificil de hacer para un bajador medio.
Gran parte de la ruta, una vez en el ajo, emboscada, con lo que abunda la sombra.
Muy recomendable para pasar una mañana.
Desde casa, unos 50 km (la mayor parte de los kilometros se suman en la aproximación) y casi 500m de desnivel acumulado (todo en las sendas)

Disponéis de información y el track en esta página





domingo, 26 de mayo de 2019

LA PLANA Y TORRECILLA DE VALMADRID EN BTT. 21 de mayo.

Un recorrido clásico del entorno de Zaragoza, donde predominan las pistas por los montes de Torrero. 

Se trata de una ruta de "rally", que sale del cementerio y sube por el barranco del Montañés hasta La Plana. Luego bajaremos hacia el este, por una pista en buenas condiciones pero con mucha grava, que nos llevará hasta el pueblo de Torrecilla de Valmadrid. Es recomendable aprovechar para reponer agua en la fuente de la plaza, ya que este es el único punto en el que lo podremos hacer. La vuelta, con continuos subes y bajas, nos devolverá al punto de inicio. 

En cuanto a la vegetación, es ambiente estepario por excelencia. Nos hartaremos de ver pájaros, conejos y alguna culebra...

Track: Pinchando aquí


domingo, 19 de mayo de 2019

OPINIÓN: LA AMPLIACIÓN DE LAS ESTACIONES DE ESQUÍ ARAGONESAS. Por Marcos Díez


El Heraldo del 19 de mayo anuncia que cuatro de los principales partidos políticos (PSOE, PP, Cs y PAR) quieren relanzar la unión de las estaciones de esquí del valle de Aragón y de Tena por la Canal Roya (enlace a la noticia). En el mismo diario anuncian la intención de ampliar la estación de Cerler no solo hacia Castanesa sino también hacia Ardonés, para aumentar la cota de la estación hasta los 2800 metros y “combatir el efecto del cambio climático” y “combatir la despoblación” (enlace a la noticia).

Resulta paradójico que la forma de combatir el cambio climático sea perpetuar y potenciar un modelo turístico que lejos de ser sostenible con el medio ambiente lo ha transformado en aras de que produzca dinero, no de protegerlo. También sorprende que sigamos confiando casi todo el desarrollo del territorio a un negocio, el de la nieve, que está condenado si no se revierte la situación climática actual. Ampliar las estaciones de esquí conlleva inevitablemente más desplazamientos de vehículos desde las grandes ciudades, más gasto de electricidad y agua para fabricar nieve, más especulación urbanística y sobre todo supone alterar irreversiblemente los ecosistemas de montaña que son (o eran) la esencia de estas montañas.

Y no vale como justificación decir que con eso se soluciona la despoblación del medio rural; el empleo que se genera es en su mayoría temporal, de mala calidad y está condicionado a las precipitaciones de nieve. Los valles se llenan de edificios que sólo se ocupan unos meses al año y fuera de temporada la población desaparece dejando lujosas urbanizaciones desiertas. Eso dista mucho de ser una medida efectiva para afianzar a la población.  

No discuto que genere riqueza, pero creo que ya es hora que prioricemos otras formas de desarrollo que no tengan como único objetivo el producir dinero a corto plazo. Es hora de cambiar el modelo y apostar por un desarrollo que sea realmente sostenible, con vistas a mejorar un futuro que por ahora no es muy esperanzador. Diversificar las actividades económicas debería ser una prioridad, y apostar de una vez por otras formas de turismo que respeten el medio en el que se desarrollan, sin destruirlo, así como por las actividades tradicionales locales. El Pirineo no sólo es nieve, es ganadería, cultura, historia, deporte, turismo rural, gastronomía o naturaleza. Entenderlo es fundamental para que perviva tal y como lo conocemos.

Nuestras montañas no se pueden comparar con la magnitud de los Alpes o las Montañas Rocosas. Es una cordillera infinitamente más pequeña y frágil, con más estaciones de esquí de las que probablemente puede soportar. No la podemos convertir en el Benidorm de la montaña. Primero fue la ampliación de Espelunciecha, solo frenada por la frontera francesa. Ahora Cerler y la Canal Roya. En el cajón de algún político esperan la estación de esquí de Punta Suelza y la ampliación hasta el túnel de Bielsa de Piau Engaly.

El planeta y el sentido común nos piden que frenemos, que ralenticemos el tren de consumismo voraz en el que vamos, que nos adaptemos a los recursos. El Pirineo es un buen ejemplo de ello. Intentemos cambiar el discurso.

sábado, 11 de mayo de 2019

PEQUE SIN RUMBO: SAN NICOLÁS DE BUJARUELO DESDE EL PUENTE NUEVO. 4 de mayo 2019

La idea de esta ruta es llegar al refugio de San Nicolás de Bujaruelo por la Senda de los Abetos, evitando el habitual camino por pista que se suele hacer en coche y nos priva de recorrer los magníficos bosques que flanquean al río Ara en esta parte del valle.

Para ello dejamos el coche en el Puente Nuevo (o de Santa Elena), antes de cruzar a la margen derecha. En esta misma curva encontraremos un panel que nos indica la senda (marcada como GR-11) que debemos de tomar. Empezaremos así un precioso paseo sin apenas desnivel que nos adentrará en la vegetación de la ribera del Ara. Hayas, bojes, pinos negros y espectaculares abetos nos acompañarán todo el camino, regalándonos su sombra y su silencio, lejos del trajín y el polvo de los coches que circulan por la pista de la otra orilla. 




El camino va en algunos tramos colgado sobre el cauce del río, por una faja sencilla pero con cierta exposición, por lo que habrá que ir con cuidado si se va con niños. También encontraremos un paso sobre roca húmeda que requerirá prestar atención si no queremos resbalarnos y acabar viendo el Ara literalmente desde dentro. Incluso hay instalado un pasamanos para ayudar a los más indecisos.


Poco antes de llegar al refugio pasaremos por un prado entre abetos, ideal para sentarse y tomar el picnic en un entorno tranquilo. Las vistas hacia Tendeñera y Mondarruego, aún nevados a esta altura del año, bien merecen la pena.
Una vez en los alrededores de San Nicolás disfrutaremos del puente románico, que acaparará gran parte de las fotos del día, y podremos comer o tomar un café en la terraza del refugio. Os aseguro que el sitio no defraudará a nadie.



La vuelta la podemos hacer por el mismo camino, aunque creo que es más interesante regresar por la pista hasta el cámping de Bujaruelo. Esto nos permitirá ver el macizo de Mondarruego y tener una mayor perspectiva del bbosque de la margen izquierda del río. Una vez en el cámping podemos seguir la pista o como hicimos nosotros cruzar el Puente de Los Abetos, que nos llevará al sendero por el que iniciamos la excursión y nos devolverá al punto de inicio.



Oreja de oso (Ramonda myconi), planta endémica del Pirineo
Longitud: 10.8 kms
Desnivel positivo acumulado: 296 metros.
Duración: unas 3:30 horas sin contar las paradas.
Dificultades: Paso de roca equipado con sirga. Sencillo pero con cuidado.
Vegetación: Camino muy sombreado, por bosque de hayas y abetos. En San Nicolás prados de montaña.
Edad recomendada: A partir de 5 años. No apta para carritos.
Track: Pinchando aquí


jueves, 2 de mayo de 2019

Circular Riglos Loarre por la cara norte de la sierra.

Castillo de Loarre

Primero de Mayo. Marcos propone salida en BTT para, aprovechando los mapas que nos proporcionaron en el espectacular Raid que organizó Peña Guara hace ya unos años en Riglos, buscar una circular diferente entre los dos monumentos mas representativos de la comarca de la Hoya de Huesca. Los Mallos y el Castillo de Loarre.

Equipados con nuestros portamapas, que siguen generando miradas allá por donde pasan fuera del contexto de un Raid o una prueba de orientación... "mira, llevan una tablet..." , salimos del aparcamiento de dentro del pueblo de Riglos.
Primer destino... el apeadero de tren. Desde allí, no sin confundirnos en alguna ocasión, llegamos a la urbanización que está unos kilómetros antes del Pueblo de Riglos y tras cruzar la carretera, tomamos una pista o camino hacia Linás de Marcuello, en un ascenso suave, pero continuo y siempre bajo la mirada de las ruinas del Castillo de Marcuello. No es la pista por la que habitualmente llevan las rutas clásicas de la zona, mas frecuentada por vehículos de motor.
Desde Linás y tras reponer agua, una subida franca nos acerca a Sarsamarcuello, pero a escasos metros del pueblo continuamos por la pista sin tomar el desvío y comenzamos un largo camino ascendente en dirección al Castillo de Marcuello y al  famoso Mirador de los Buitres. Alcanzada prácticamente la cota del castillo, pero sin llegar a acercarnos del todo, se cruza una pista que señala el camino hacia Loarre... bueno... y hacia Bierge, que "solo" está a 118 km... y que forma parte de la GR 16 o "camino natural de la Hoya de Huesca".
Sin abandonarla en ningún momento llegamos al castillo de Loarre. Está a tope de gente, pero sigue siendo precioso aún en estas condiciones. Varios Endureros nos han sorprendido bajando como si los persiguieran por unas sendas balizadas que cruzaban la pista. Resulta que el próximo fin de semana hay una prueba del campeonato de Aragón en esa zona y andan entrenando.
Comemos unos pocos frutos secos, reponemos agua de nuevo y nos preparamos para la gran subida de la jornada. Saliendo del Aparcamiento del Castillo de Loarre hay una gran pista que sube a la Ermita de Santa Marina. La verdad es que no hay dificultad técnica alguna, de hecho es la pista que toman los afanados Parapentistas para subir al alto desde el que se lanzan sobre el castillo y hoy también la pista que equipos varios y papás implicados estan usando para subir a los chavales al punto de inicio del vertiginoso descenso de enduro para entrenar la prueba de este fin de semana.

La cima merece la pena. La Ermita está acompañada de un espectacular merendero con vistas a la Hoya de Huesca. Pero a los 2 minutos de iniciar el descenso hacia la cara norte, ya territorio desconocido para nosotros... ¡¡OSTRAS!!... se nos aparece una de las panorámicas del pirineo mas espectaculares que recuerdo. Al menos 10 minutos estuvimos contemplando y fotografiando, pero de ninguna manera se consigue reflejar en una foto lo espectacular del paisaje.

Empieza el descenso serio. Dos o tres curvas de pista bien pisada y nos adentramos en una... no se si pista o senda... muy rota y embarrada a tramos, llena de grava en otros tramos... que nos baja hasta lo mas profundo del valle de Escalete. Afortunadamente no hasta la misma Foz, ahorrándonos un tramos de ida y vuelta poco atractivo en técnica y fisicamente (ya llevavamos más de 1100m positivos). Menudo paraje. Que soledad. Vemos algún puesto de caza... y ni un alma desde que iniciamos el descenso.
Solo queda remontar el valle hasta el Collado de Santo Román, de nuevo en la GR y completar los mas de 1450m de desnivel de la ruta.
Desde alli, senda a tramos complicada que baja directa a la pared de los buitres y el camino que retorna de los Mallos menores hasta el pueblo.

Ruta dura físicamente por el desnivel acumulado (+1500 aprox), que hicimos  a un ritmo suave entre otras cosas por falta de forma, pero también por el desconocimiento del terreno y la incertidumbre del desnivel y distancia que nos quedaba. A nivel paisajístico me atrevo a decir que imposible de mejorar. Riglos, Castillo de Loarre, la Hoya de Huesca y sus embalses desde Santa Marina y la vista de los pirineos desde la cara norte de la sierra de Loarre... 10 de 10.

Track aquí

Apeadero de tren

Llegando a Sarsamarcuello. El castillo de Marcuello arriba espera

Llegamos a la GR

Castillo de Loarre. 



Subida hacia Santa Marina, el castillo se va alejando. Endureros subiendo a por su senda



Ermita de Santa Marina


Panorámica sin poder reflejar la belleza real. empezando por la izda... Bisaurin, Aspe, Collarada con peña Oroel debajo, Zona panticosa, Macizo del Perdido...


Profundo valle en la cara norte de la sierra de Loarre. 
remontando por allí... llegaremos a la GR y acabaremos el ascenso


Tras bajar por la senda llegamos a la parte trasera de la ferrata de Riglos
y volvemos por el camino que retorna de los Mallos menores... que ya los tenemos domados... jajaja