Aprovechando que tenía que pasar por el pueblo de Yebra de Basa, me echo la bici al coche y paro en el pueblo para embarcarme en la ruta número 13 del Espacio BTT Pirineos Alto Gállego. El número y el color negro de la ruta ya prometen..., ¡habrá que ver si es tan fiero el león como lo pintan!.
Como he anticipado la ruta sale del pueblo de Yebra de Basa, un bonito municipio al que se puede llegar desde Sabiñánigo o desde Fiscal por la nueva carretera que comunica ambas localidades. Como suele pasar con las rutas de este excelente centro de BTT, en la salida encuentro un cartel explicativo con el mapa y el perfil, y un punto de asistencia con herramientas, hinchador, etc... La filosofía del recorrido es subir por la pista hasta la ermita de Santa Orosia, al pie del pico Oturia y luego bajar por un recorrido de enduro hasta el valle de Sabiñánigo. Casi todo el desnivel se salva por tanto de salida, por una larga y progresiva subida que nos va llevando por encima del valle hasta la ermita. En su recorrido dejaremos de lado el desvío hacia la ruta de las ermitas rupestres donde por lo visto descansó alguna vez el Santo Grial... (¿pero no lo encontró Indiana Jones en Petra?).
Al llegar a la ermita disfrutaremos de las vistas y de la original fuente que mana del suelo, con el Oturia presidiendo en todo momento la estampa. Desde aquí esxiten múltiples posibilidades para seguir; hacia Buerba, hacia Fiscal o de nuevo hacia el valle por Fanlillo. Sin embargo la ruta que estoy siguiendo me lleva hacia el oeste por un barranco técnicamente bastante difícil y expuesto, que me obliga a bajarme de la bici en más de un tramo. A pesar de la dificultad se disfruta bastante puesto que se adentra en el bosque y permite descubrir bonitos rincones del río.
Una vez abajo llegamos al pueblo de Satué, al que entramos por su iglesia románica. A partir de aquí, ya con el calor apretando, la ruta se convierte en un sube y baja rompepiernas por senderos entre pueblos (como Isún y San Román de Basa u Osán), campos de cultivo y margas, que desgasta muchísimo y que nos hará recordar las fuerzas que gastamos en la subida inicial a Santa Orosia. Sin apenas tocar la carretera nos llevará de nuevo a Yebra para cerrar el círculo.
En resumen diría que en esta ruta tiene como punto fuerte la subida a la ermita y su bajada, ideal para endureros con ganas de marcha, pero que por contra, se hace demasiado dura y enrevesada en sus kilómetros finales. Aún así, ¡gran día de BTT!.
Track de la ruta y web del espacio BTT: pinchando aquí
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