Desde Linza, con amor... (Jacobo)

Día clave de mi nula temporada, mi mujer va a parir en 3 semanas, el segundo, apenas queda nieve y salvo circunstancias milagrosas, huele a última salida de travesía de este "invierno" (para mi, no asustarse, los Roche y cia. seguirán alimentando el blog). ¡Hay que buscar la mejor salida posible!.
Teniendo en cuenta la escasez de nieve (da auténtica pena ver Collarada o el Garmo Negro), Marcos se encarga de seleccionar la salida optima. Por cantidad de nieve, por condiciones y animados por una preciosa crónica de la gente de la Meteo que viene, finalmente decidimos subir a Linza (Ansó) y desde allí bien subir a La Mesa de los Tres Reyes o bien al Petrechema.
Salida larguilla, a los tonto mas de 15km sea cual sea la ruta seleccionada, con desniveles muy parecidos (unos 1100-1200) y, en principio, no muy exigentes técnicamente. Lo malo es que está a t.... por c... de casa. Así que toca...¡Madrugón del quince!.
Marcos y Yo acudimos desde Zaragoza, Rober e Irene desde Panticosa, Los Roche y Galo causan baja por diversos motivos.
A pesar del madrugón, hasta las 9:30 no nos ponemos las botas. Ya de camino hemos notado un pequeño detalle que no nos ha hecho mucha gracia... Hace viento, bastante viento... y eso no está bien...
De todos modos el día es espectacular, solazo, alguna nube alejada en alguna cumbre vecina y mucho ambiente en Linza. Bueno, tanto que casi no podemos aparcar.

Menudos canutos se deben estar haciendo en el Mallo Acherito...

Iniciamos el ascenso por una pala inicial muy "podrida" y eso que no son ni las 10 de la mañana, pero claro, con 12 grados que hace, es dificil que la nieve aguante. Palita tras palita vamos ganando altura. A ratos hay que descalzarse, no por no dañar las tablas, básicamente es que desaparece la nieve y nos toca portear. (Como ha dicho uno de los participantes en la actividad... ¡Estos tramos de barro no salían en la crónica de los de la Meteo!).

El caso es que, china chana, nos vamos acercando al collado de Linza, auténtico paso clave de la salida, el punto donde decidiremos nuestro destino. ¿Será la historica y simbolica Mesa de los Tres  Reyes? pico emblemático, mas alpino, coniderado por muchos el mas alto de Euskal Herria. ¿Será el Petrechema? esquiable hasta la cima y con un descenso, según narran, memorable.
Pues el auténtico protagonista de la mañana tomó la palabra y nos calló a todos. ¡MENUDO VENDAVAL!
La cosa es seria, se hace dificil mantenerse en pie y lo cierto es que aunque tenemos a la vista los dos posibles objetivos, uno se imagina infernal el ascenso restante. Fuera cual fuera el seleccionado, nos espera un calvario de transiciones entre tablas, crampones y piolet, de nuevo tablas... en unas condiciones lamentables.

Es dificil atrapar el viento en una foto, pero atencion a mi hombro

Hay diversas formas de entender  la montaña, el deporte y la vida en general. Yo acepto el cansancio y acepto las dificultades, pero penurias... no tengo ganas.
Como decia Iñaki Ochoa de Olza, ochomilista Navarro fallecido en 2008 (precioso su libro Bajo los cielos de Asia), "La montaña lleva allí siglos y otros tantos va a seguir". Podemos volver en cualquier otro momento y nos estará esperando.
Tambien decía "las prioridades son, en ese orden, VOLVER TODOS, VOLVER AMIGOS Y HACER CIMA" No quiero decir con ello que corrieramos peligro por ese viento, pero cuando no se puede... pues no se puede.
Una auténtica pena, íbamos bien de ritmo, nos encontrábamos fuertes, pero el amigo viento nos amargó de nuevo (y van muchas veces este invierno) la salida.
Al menos grandiosa compañía y un nuevo test para mis nuevas botas, que da gústo lo bien que van...

Foto realizada por Marcos en el mismo campo base del Anapurna